Smart Content, el futuro del marketing de contenidos
Casi todas las empresas hacen marketing de contenidos para atraer tráfico a su web. ¿Pero son relevantes los contenidos que ofrecen para todos sus usuarios? En muchos casos no, lo que reduce el engagement, la conversión y la fidelización. Para evitarlo, se extiende el uso del Smart Content o contenido personalizado. ¡Descubre cómo funciona!
Imagina que buscas información en Internet sobre un tema que te interesa y el primer resultado que se muestra responde exactamente a tu consulta. ¿Suerte? Entras en la página y encuentras información actualizada y de calidad sobre lo que estabas buscando. Te gusta tanto que decides suscribirte a su boletín y el primer mensaje que te mandan es precisamente un completo ebook sobre el asunto del cual querías saber más. ¿Te están leyendo el pensamiento? No, es que has topado con un sitio que aplica correctamente el Smart Content.
¿Qué es el Smart Content? El Smart Content, también conocido como “contenido inteligente” o “contenido personalizado” es una técnica de marketing que consiste en adaptar la información que se ofrece al usuario según su perfil y necesidades. Nace como reacción a la generalización del marketing de contenidos, que se basa en ofrecer un mismo contenido a todos los usuarios, sin tener en cuenta sus diferentes intereses. ¿El resultado? Menos del 20 % del contenido que se comparte online interesa a sus destinatarios, según BrightEdge.
Suena muy novedoso, pero en realidad ya hace tiempo que se está utilizando esta técnica. Smart Content son los resultados de búsqueda personalizados que te ofrece Google a partir de lo que aprende de ti; las publicaciones personalizadas que Facebook, Twitter o LinkedIn muestran en tu página de usuario; o las sugerencias de compra que aparecen en una tienda online cuando estás haciendo un pedido y te propone otros productos similares o relacionados.
Sin embargo, el Smart Content va a más y es una de las tendencias del marketing en 2019.
¿Qué necesitas para hacer Smart Content?
La teoría está bastante clara, pero… ¿qué hace falta para llevar a la práctica el Smart Content? Básicamente, implementar esta técnica de marketing requiere los siguientes elementos:
1. Conocer a tus usuarios: lo más sencillo sería hacerles rellenar un extenso formulario la primera vez que entren a tu web, blog o tienda online. Sin embargo, la gente está cada vez menos dispuesta a ceder sus datos personales. Pero hay otra información que puedes obtener automáticamente en las estadísticas de tu sitio web: ubicación, hora y duración de la visita, dispositivo de acceso, páginas vistas, búsquedas realizadas en el sitio… Esta información anónima es oro puro para el Smart Content.
2. Generar contenido inteligente: ¿qué es el contenido inteligente? Aquel que se puede adaptar fácilmente para diferentes usuarios. Un buen ejemplo es el e-mail marketing segmentado: creas una oferta de tu tienda online y la personalizas para los distintos receptores, en función de dónde estén, si son clientes nuevos o existentes, el tipo de empresa en la que trabajan, etc. Ahora piensa en hacer esto mismo pero aplicado a los textos de tu sitio web, artículos para blog, vídeos, ebooks… ¡No es tan complicado! Basta con crear pequeñas piezas de contenido modular que sean fácilmente intercambiables para generar un contenido personalizado a la medida de cada usuario.
3. Mostrar contenidos personalizados: ya sabes cómo es el usuario al que te diriges y tienes el contenido personalizado que deseas ofrecerle, pero… ¿cómo mostrárselo? Con una web tradicional de contenido estático, es difícil ofrecer contenido a medida, al igual que no puedes segmentar tus campañas de e-mail marketing si no puedes crear distintos grupos de correos en tu base de datos. Aunque puedes lograr muchas cosas con un uso inteligente del menú de navegación, para hacer Smart Content de verdad necesitas un gestor de contenidos preparado para la personalización. Empresas como Hubspot o Quark ya ofrecen soluciones de Smart Content para todo tipo de sitios.
¿Te haces una idea? Al igual que cuando entras en Netflix o en Amazon, la página que ves no tiene nada que ver con la que se muestra a otro usuario, pronto empezaremos a ver que las webs, blogs y tiendas online que visitamos ofrecen cada vez más contenido personalizado.
Y esto es solo el principio: gracias a tecnologías como el Internet de las Cosas, los beacons, el reconocimiento facial, etc. el Smart Content se extenderá a otros ámbitos como la señalización digital. ¿Recuerdas aquella escena de Minority Report en que las pantallas de un centro comercial saludaban por su nombre a cada persona que pasaba y le mostraban un anuncio a medida? ¡Pues en la famosa Piccadilly Circus de Londres ya están haciendo algo similar!
¿Crees que el contenido personalizado es positivo? ¡Comenta en las redes sociales!