¿Qué significa soñar en otra lengua diferente a la materna?
Los sueños siempre han sido un misterio para muchos de nosotros, con una lógica extraña e indescifrable que a menudo intentamos interpretar. Una cuestión que suscita gran interés es si el idioma que estamos aprendiendo tiene algún efecto en nuestros sueños. ¿Es realmente un signo de fluidez soñar en otro idioma? Los expertos de Babbel, la plataforma premium de aprendizaje de idiomas, han analizado la relación entre estos dos aspectos.
En 1990, el investigador Joseph de Koninck realizó un estudio en el que encontró una relación entre el idioma en el que se sueña y el progreso en el aprendizaje del mismo. Durante diez semanas, un grupo de estudiantes llevó un diario de sueños dos semanas antes y después de tomar un curso de francés de seis semanas. Los resultados mostraron que aquellos que más progresaron en el curso tenían sueños en francés con mayor frecuencia y una mayor comunicación verbal en dichos sueños.
Además, un artículo publicado en la revista Harvard Gazette señala que algunos estudios han señalado que incluso las personas que no dominan completamente un segundo idioma suelen tener sueños en ese idioma de vez en cuando. Los neurocientíficos sugieren que esto se debe a que el área prefrontal, responsable de los controles de la realidad, está inactiva durante el sueño, lo que permite a las personas sentirse más competentes en un idioma que están aprendiendo. Es posible que las personas con conocimientos básicos de un idioma se sientan más seguras en sus sueños porque no se juzgan a sí mismas de la misma manera que lo harían en la vida real. Según la autora, la mejor forma de entender los sueños es pensar en ellos como si estuviéramos en un estado biológico diferente, donde las áreas asociadas con la visualización y la emoción están más activas que la lógica habitual, lo que hace que seamos menos verbales y más imaginativos cuando soñamos.
“Tal vez soñar en otra lengua sea una expresión de nuestro deseo de «interiorización» lingüística y cultural, de aprovechar el sentimiento de pertenencia que puede aportar una nueva lengua. Se considere o no un hito lingüístico, lo cierto es que indica una fuerte conciencia y compromiso con el nuevo idioma”, afirma James Lane, colaborador de Babbel.
En este sentido, en un estudio realizado por un equipo de investigadores liderado por el psicólogo Michael Bender de la Universidad de Tilburg, se indicaba que los participantes que se identificaban con su cultura de origen eran más propensos a soñar en su lengua materna, mientras que los que se identificaban más con la cultura de acogida eran más propensos a soñar en el idioma de la comunidad.
Lo cierto es que todavía se debate acaloradamente sobre si los sueños tienen alguna finalidad psicológica o fisiológica real. Algunas de las hipótesis más comunes sobre por qué soñamos son que lo hacemos para resolver problemas, procesar información o deshacernos de cosas que el cerebro no necesita. Sin embargo, los sueños siguen siendo, en gran parte, un misterio para la ciencia. “Soñar en otro idioma puede ser una señal de que el cerebro está procesando el aprendizaje del idioma de una manera más profunda, o de una interiorización cultural más relacionada con lo emocional, aunque no necesariamente es un indicador absoluto de fluidez” concluye Esteban Touma, profesor de la plataforma de clases en vivo de Babbel, Babbel Live.