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El engagement del empleado, un reto para la comunicación interna de las empresas

29 mayo 2019, By Eva Calo

Recientemente Canela ha formado parte de un grupo de trabajo organizado por la Asociación de Empresas Consultoras de Relaciones Públicas y Comunicación (ADECEC),  focalizado en dar valor a la comunicación interna dentro de las empresas. Además de crear de forma conjunta el manifiesto “La comunicación interna, gran aliada de los nuevos modelos de negocio”, ha participado en la organización de una jornada en la que se pudieron analizar las tendencias en comunicación interna, desde el punto de vista de la empresa y de las agencias de comunicación y relaciones públicas.

Esta jornada permitió a los asistentes disfrutar de una charla distendida acerca de lo que hoy en día es importante en la comunicación interna, y valorar las tendencias que cada vez están teniendo más éxito en las empresas. Lo primero que hay que tener en cuenta es el cambio radical que está experimentando la comunicación en las empresas. Vivimos en la era digital donde las redes sociales ocupan una gran parte de nuestro tiempo, y por tanto debemos considerar este tipo de canales a la hora de planificar la comunicación de la empresa con sus empleados. Esta comunicación debe ser bidireccional, y por tanto debemos entender que los formatos como la intranet, las newsletter o los tablones de anuncios deben evolucionar.

Canela

El objetivo principal debe alinearse con el que buscan las empresas en la relación con sus clientes. Si una empresa trabaja su comunicación externa para conseguir su confianza, debe hacer lo mismo para motivar a sus empleados, a través de una comunicación cercana y que cuente con su feedback. El secreto está en lo que ahora se llama engagement en el lenguaje de las redes sociales, es decir, el grado de compromiso de un consumidor con una marca. Aplicado a la comunicación interna en las empresas, este engagement sería el compromiso conseguido por los empleados hacia la empresa… ¿Hay mejor embajador en una empresa que sus propios empleados? Definitivamente no.

Los empleados deben recibir una comunicación adaptada a su línea de trabajo, y las empresas para ello deben adaptar la comunicación interna de la misma forma que si fuera una comunicación personal. Es muy importante involucrar a los empleados, y por ello no puede faltar nunca la opción de recibir feedback por parte de los empleados. Lo esencial es mantener siempre informados a los empleados, para evitar sorpresas, tanto en lo bueno como en lo malo, así la resolución de problemas es más sencilla. La confianza es una baza fundamental, y por ello es importante trabajar de forma cercana para conseguirla.

Otro de los temas que no se pueden olvidar es la variedad generacional que hoy encontramos en las empresas. La llegada de la Generación Millennial conlleva la utilización de nuevas tecnologías y recursos digitales para atraer su atención. Al igual que se plantean estas necesidades en el mundo de la comunicación externa, la publicidad y el marketing, la comunicación interna también debe adaptarse a los nuevos hábitos de vida. Las empresas deben aprovechar los canales digitales para comunicarse con sus empleados, para poder hablarles en el lenguaje que mejor entienden. Los contenidos deben ser cada vez más atractivos, e incluir vídeo e imagen, que es el formato que reina en la actualidad.

Esta estrategia debe ser planificada y organizada, pero sobre todo debe contar con la aprobación y la implicación de todas las áreas y niveles de la empresa. De nada sirve una campaña para atraer talento joven a una empresa, en la que no se consideren las redes sociales como parte importante de su difusión. Igual que no sirve de nada querer tener una comunicación más estrecha con los empleados sin que exista la comunicación en persona. El contacto directo con el equipo es uno de los pilares básicos para que la comunicación sea fluida. Por último, es muy importante convencer a la Dirección de la empresa de la importancia de esta estrategia. La digitalización ha llegado para quedarse, y no puede ser sólo parte de la estrategia de unos pocos. Cada empresa puede suponer un caso distinto, por eso es necesario hacer un diagnóstico previo antes de plantear la estrategia, pero sobre todo es importante conocer a la audiencia y escucharla. El reto debe ser fidelizar el talento, y para ello hay que buscar en todo momento la forma de enamorar al empleado.